LA BENDICIÓN DE NUESTRO PADRE PARA EL NUEVO AÑO

El Señor te bendiga y te proteja, ilumine su rostro sobre ti y te conceda su favor; el Señor se fije en ti y te conceda la paz.

miércoles, 20 de enero de 2016

Un SMS del Diablo


En una posesión el demonio es el que toma el control de la persona poseída cuando el quiere.
En este caso, tomó el celular de la persona, me buscó entre sus contactos y me envió este mensaje:
Todos los mensajes los escribía con mayúsculas. a veces estaba chateando con la persona y de pronto cambiaba la letra, entonces sabía que el demonio había entrado.


viernes, 15 de enero de 2016

Psiquiatras preparan terreno para declarar la religión una enfermedad mental | VISTOENLAWEB.ORG

Psiquiatras preparan terreno para declarar la religión una enfermedad mental | VISTOENLAWEB.ORG

Psiquiatras preparan terreno para declarar la religión una enfermedad mental

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En un reciente artículo de la revista Time se entrega una visión acerca de los daños que podría causar la religiosidad.

La religión puede ser una fuente de consuelo que mejora el bienestar. Sin embargo, algunos tipos de religiosidad podrían ser una señal de problemas más profundos de la salud mental.

Al ver a sus hijos orar con más ganas que de jugar videojuegos, la mayoría de los padres gritarían: "¡Aleluya" o cualquiera que sea su expresión de alegría. Y deberían. La investigación muestra que la religión puede ser una fuerza positiva en la vida de los niños, al igual que lo puede ser para los adultos.

"La religión", dice Bill Hathaway, una psicóloga clínica de la religión y Decano de la Facultad de Psicología y Consejería en la Universidad Regent, "tiene que ver con que el niño tenga un mayor sentido de autoestima, un mejor ajuste académico y menores tasas de abuso de sustancias y comportamiento delictivo o criminal."

Así que si su niño está inmerso en las Escrituras después de la escuela y ora con regularidad durante todo el día, puede respirar un suspiro de alivio. Es un buen chico. Mi hijo está bien.

O tal vez no… La devoción de su hijo puede ser algo grande, pero hay algunos niños cuyos ritos religiosos necesitan una mirada más profunda.

Para estos niños, una práctica con exceso de celo de su fe familiar – o incluso de otra fe – puede ser un signo de un problema de salud mental subyacente o un mecanismo de defensa para lidiar con el trauma o el estrés sin dirección.

Los terapeutas privados informan que están viendo a niños y adolescentes a través de una serie de creencias religiosas cuya práctica puede ser problemática. La cantidad de tiempo que dedican a la oración, o a otros actos de la práctica espiritual, no es tan importante, dicen, como la calidad de esta devoción, y si ayuda a los niños o lugar de ello los aíslan y debilitan su trabajo escolar y sus relaciones. Los niños con trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), por ejemplo, rígidamente pueden repetir versos sagrados, por ejemplo el Ave María o centrarse en otros rituales menos por un sentido más profundo de su fe, sino más bien como una expresión de su trastorno. "Parece positivo, pero podría ser negativo", dice Stephanie Mihalas, profesor de la UCLA y psicólogo clínico licenciado.

Tal comportamiento ritualista, dice, también puede reflejar la manera de un niño de hacer frente a la ansiedad, y en realidad no podía ser más espiritual que el lavado de manos fanático o el temor a caminar sobre las grietas de las baldosas de la calle. "Estos niños temen que si no obedecen sus reglas religiosas perfectamente", explica Carole Lierberman, MD, un psiquiatra de Beverly Hills, "Dios les castigará".

Algunos niños sufren de escrupulosidad, una forma del trastorno obsesivo compulsivo que implica un sentimiento de culpa y vergüenza. Las víctimas se preocupan obsesivamente de que han cometido blasfemia, han sido impuros o han pecado de otra manera. Ellos tienden a concentrarse en ciertas reglas o rituales en lugar de en la totalidad de su fe. Se preocupan de que Dios no los perdonará. Y esto puede señalar el inicio de la depresión o la ansiedad, dice John Duffy, un psicólogo clínico del área de Chicago que se especializa en adolescentes. "Los niños que han cometido "errores" con el sexo o el consumo de drogas", dice, "pueden tener dificultad para perdonarse a sí mismos".

Tal meticulosidad con las prácticas religiosas no parece tan dañina, pero los comportamientos extremos, como los delirios o alucinaciones pueden ser un signo de enfermedad mental grave. Al ver y escuchar cosas que no están allí pueden ser síntomas de psicosis maníaco-depresiva, trastorno bipolar o esquizofrenia de inicio temprano. Pero los padres pueden estar menos en sintonía con tal comportamiento poco saludable cuando se produce bajo el pretexto de la fe.

No es raro que los niños de familias en las que la discordia marital, la dura disciplina, el abuso o la adicción están presentes, realicen rituales de protección. Si saben que sus padres aprueban la religión, dice Lieberman, "se trata de ser niños buenos y permanecer por debajo del radar del cáos de la familia o de la rabia de los padres. O, como Mihalas ha visto, algunos niños incluso empujan a sus ya practicantes padres a ser aún más estrictos, por temor a que la catástrofe golpee si no.

¿Cuándo levanta estas banderas rojas la religiosidad? La prueba fundamental se centra en cómo los niños están funcionando en el resto de sus vidas. ¿Están haciéndolo bien en la escuela, practican deportes o música, se socializan con amigos? Si es así, entonces su fe es probablemente una fuente de fortaleza y capacidad de recuperación. Si, parece que las prácticas religiosas y rituales pueden haberse adueñado de su vida cotidiana, y desplazado sus actividades normales, los expertos sugieren tomar medidas para comprender lo que está provocando que se centren en la fe.

Time



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jueves, 7 de enero de 2016

Como combatir la Influencia Diabólica

Tengo muy claro como hay que actuar ante un caso de Influencia Diabólica. Muchas personas con estos síntomas van al psiquiatra y este los atiende como profesional competente, al menos estos profesionales de la psiquiatría así lo creen. Sin embargo estamos ante enfermedades o trastornos de la mente de tipo espiritual y estos problemas por el hecho de ser su origen espiritual, lo mas adecuado es tratarlas con la oración. Al ser el demonio el que los origina, el tratamiento ha de ser contra el demonio, con aquellas acciones que al demonio mas le molesten y es por eso que recomiendo la oración, las practicas piadosas, el ir a Misa, la lectura de la Santa Biblia, en especial los Evangelio, el fomento de las virtudes teologales y cardinales y el rechazo al pecado sobre todo los que se han convertido en iniquidad por la frecuencia en la caída en ellos. Es un camino largo pero muy eficaz porque en seguida se ven los resultados, empiezas a sentirte mejor, vas tomando confianza, aprendes a tener alejado de ti al demonio y en definitivas puedes hacer una vida casi normal; es importante tener en cuenta que se ha de estar con la atención puesta en lo que nos suceda tanto interior como exterior para recurrir cuanto antes a la oración, que puede ser perfectamente el Padrenuestro que la gran mayoría nos la sabemos y es muy eficaz porque es la oración que Jesucristo, que ya venció al demonio en la Cruz, nos enseñó.

Todo lo que sea buscarse tratamientos alternativos, no cristianos, están condenados al fracaso y no solo al fracaso sino que se pueden complicar aún mas las cosas.
- Es que me han hablado de un sistema que puede ser eficaz como es la oración de las 7 potencias africanas y me gustaría conocer tu opinión.
- Mi opinión es no recurrir a nada que no sea cristiano, no porque te pongan un santo delante te vas a creer que son cristianos, la santería no es cristiana, mas bien diría yo que es del demonio y nos vas a meter al zorro en el corral para que cuide las gallinas. Por otro lado el modo de operar de esta gente es el siguiente, te hacen sus oraciones te invitan a que te tomes sus brebajes y al principio parece como que hubieran resuelto el problema pero con posterioridad te iras sintiendo aun peor que estabas y cuando acudes de nuevo para que te traten, te piden mas dinero, si pueden te meten al mismísimo diablo para desplumarte y al final te quedas sin dinero y con el demonio dentro en una posesión. ¿Merece la pena seguir por este camino? Sinceramente pienso que no.

Hay un camino mas corto, el mismo que emprendieron los Reyes Magos de Oriente; el buscar la verdad, el buscar el Amor de Dios, con humildad, con perseverancia, cuando emprendes este camino, Jesucristo se manifiesta porque Él dice: nadie viene a mi si mi Padre no le atrae. Os invito a esta gran aventura que sin duda es la mejor forma y la mas rápida de apartar de ti cualquier problema que te esté ocasionando el demonio, el encontrarte con Jesucristo es lo mas eficaz en la lucha contra el demonio, pero si emprendes esta aventura recuerda que has de orar, que has de realizar practicas piadosas, ir a Misa, frecuencia de Sacramentos, y en definitiva todas esas prácticas que un buen cristiano realiza para santificarse.

Vade Retro Satana

Vade Retro Satana
Sal maldito vete con todas tus mentiras porque Dios ha querido que yo sea su Templo